Tanto los estudiantes como profesores de ELE deberían conocer bien, además de la materia de estudio, (la lengua), cuál ha sido la evolución histórica de los estudios sobre la gramática y el nacimiento de la Lingüística.
1.Una Gramática es la descripción de las reglas que siguen los hablantes de una lengua al comunicarse.
2. En nuestro mundo occidental, se considera que la primera gramática tal como se entiende actualmente fue la del griego Dionisio de Tracia, del siglo I antes de Cristo.
3. La primera gramática del castellano es la de Antonio de Nebrija de 1492.
4. Las reglas gramaticales no son absolutas ni inmutables. A lo largo de los siglos los estudiosos han ido desarrollando, completando y afinando los conceptos e ideas que formularon esos primeros maestros. En el siglo XX, tan abundante en –ismos, se formularon múltiples teorías sobre lo que significa hablar y escribir una lengua. La ciencia que la estudia es la Lingüística.
5. La Lingüística no es una ciencia exacta. Y tiene muchas escuelas, muchas formas de concebir y explicar la lengua: está la Lingüística funcionalista, estructuralista, generativista. Y luego, las teorías se aplican a múltiples campos: lingüística forense, computacional, etc.
6.Uno de estos campos es la Lingüística Aplicada, y más concretamente, la que estudia la adquisición de la lengua, sea la lengua materna o una lengua extranjera. Ese es nuestro campo, el de los profesores de ELE.
7. El “Marco común europeo de referencia para el aprendizaje, la enseñanza y la evaluación de lenguas” es un documento importante para nosotras. Intenta describir qué significa usar, aprender y enseñar lenguas en el mundo actual. El capítulo 5.2 es especialmente relevante para nuestro propósito, pues habla de “Las competencias comunicativas”.
8. Cualquier hablante de una lengua conoce las reglas gramaticales de esa lengua. Ninguna persona hablante de español comete errores en una frase como “A mí me gustan los tomates maduros”. Aunque no sepa analizar sintácticamente esa frase en sujeto, predicado, complemento, tiene un conocimiento implícito de la gramática española.
9. Las personas que han estudiado la gramática en la escuela saben distinguir (hasta donde han llegado) el sujeto del predicado, o que “los nombres tiene número singular o plural”. Tienen un conocimiento explícito de la gramática española.
10. Si una persona no es hablante nativa de español, para llegar a producir sin errores una frase igual o similar a “A mí me gustan los tomates maduros”, por regla general, necesitará dedicar bastantes horas a estudiar las reglas de la Gramática española, siempre que tenga el interés y motivación suficiente para ello. Nuestro trabajo consiste en darle las herramientas para conseguirlo.
Si quieres saber más sobre el tema, acude al artículo gramática pedagógica.